Como es habitual en nuestras últimas presentaciones, habíamos acordado ensayar una hora en el Rockservatorio de Colón en Miraflores antes del concierto del sábado 29. Nos hemos dado cuenta que necesitamos más que calentar para entrar entonados a un escenario. Las veces que nos hemos juntado en el momento de la presentación, a pesar de tener ensayos a cuestas esa misma semana, se nos ha hecho difícil empalmar en el escenario. A veces la batería se iba por su cuenta, la voz se perdía respecto de los demás instrumentos o el bajo manejaba su propia velocidad. Lección 1: ponernos a tono antes de un concierto, el mismo día si es posible... Eso fue lo que hicimos la noche del 29 de octubre. Quedamos en encontrarnos a las 8 pm. para hacer una corrida de las canciones que íbamos a tocar.
(Fotos de la presentación: Regina Maruyama)
Como también es habitual, demoramos en llegar a la sala. Yo llegué segundo, junto con el Bombo que pasó por mi jato luego de su clase de pintura. Llevaba en sus manos el cuadro de una calata (para eso lleva talleres de dibujo...) y su guitarra en su funda a cuestas. En la sala Coco ya había llegado, y esperaba junto a su sobrino Franco y su pata Diego, quienes nos acompañarían durante toda la noche y tuvieron el encargo de sacarnos fotos con la cámara del Bombo. El flash nunca funcionó, pero bueno, esos son gajes del oficio. Ya eran pasadas las 8.15 pm, así que arrancamos nosotros tres con las nuevas mientras esperábamos a los demás. No pasó mucho hasta que llegara Esteban y el último en aparecer fue el chato Alfonso, preocupado porque su garganta estaba resentida por el esfuerzo de la semana.
Kaos General en vivo el sábado 29 de octubre, gracias a la gente de Jamón Producciones
Nuestro set list era el siguiente: 1. Que sigan ladrando los perros / 2. Violencia que asesina / 3. El regreso / 4. Honestidad / 5. Qué sabes tú / 6. Toque de Queda / 7. Permaneceremos (hasta el final) / 8. Kaos General; pero no nos dio tiempo de tocarlas todas en el ensayo. Creo que tocamos hasta Toque de Queda y de ahí le dimos nuevamente a alguna nueva. Ya teníamos encima a una banda que ensayaba a partir de las 9 pm. (sí, hay gente que ensaya los sábados a las 9 pm...) así que salimos ya empilados. Bombo, Alfonso y yo nos montamos en mi carro y los demás chaparon un taxi. Destino: la cuadra 1 de Bolognesi en Barranco.
Ninguno de nosotros conocía el local del Uazko Bar así que llegamos a tientas. Dejamos el carro en la plaza de Barranco y de ahí lateamos por el Boulevard hasta llegar a Bolognesi. Ahí me encontré con uno de mis alumnos de Antropología, él sabía que tocábamos esa noche pero al final no se animó a ir, no sé si por la plata o porque tenía un mejor plan que asistir a una noche de viejos hardcorianos. La lata no fue demasiado larga hasta que ubicamos el local. Allí nos encontramos con una sorpresa: los hermanos Loza (Raúl y Pablo, de Justicia Inmoral, los organizadores) estaban afuera del local con los equipos en la vereda y las puertas del bar cerradas. Eran ya más de las 9.30 pm y se suponía que las bandas empezaban a tocar a las 10 pm. El dueño del Uazko se había atrasado y corría un poco de incertidumbre... decía que estaba en camino pero, ¿llegaría? En ese momento, me sentí regresar 25 años hacia el pasado a velocidad acelerada. El día del debut de Kaos General habíamos llegado (nerviosos) al local del Bar Unicornio en Barranco (igual, a media cuadra de Bolognesi, pero cerca de Cajamarca) y el sitio estaba cerrado. Ya no recuerdo cuál fue la razón del problema, pero felizmente alguien consiguió que nos trasladáramos a los Reyes Rojos y ahí armamos una presentación casi en familia...
Ahora, sin embargo, si no aparecía nadie, ¿adónde iríamos? Ya no hay local de los Reyes que nos reciba... en medio de esas alucinadas llegó el pata, abrió la puerta del local y empezó la preparación del concierto... media hora después Abraxas se colocaba en el escenario y abría la noche. Nosotros conversábamos y tomábamos unas chelas mientras comenzaba a llegar algo de gente. Este es un tema de los nuevos tiempos: se hace muy difícil congregar gente para los conciertos. La promoción se distribuye por las redes sociales, se reparten flyers en los conciertos, las entradas están baratas pero la respuesta suele ser baja en número de asistentes. ¿Tendremos que volver a los viejos tiempos y empapelar la ciudad con afiches artesanales? Lo cierto es que se comenzó a generar el ambiente, el cual se completó cuando subió Desarme al escenario. El sonido poderoso ya nos invitaba a subir, ya que nosotros éramos los siguientes en el orden de presentación. Para entonces la gente de Contraorden Discos ya había llegado al local y compartían una mesa con Julio Güissa. Nosotros completamos la "iniciación" que le debíamos al chato Alfonso (ya contaré esto en otro post) y ya estábamos a minutos de presentarnos.
Nos costó escuchar la voz en la presentación. Los instrumentos sonaban claros, pero los parlantes de la voz no llegaban a nosotros así que era un esfuerzo ver a Alfonso matándose en la voz y nosotros tratando de mantenernos cuadrados. Evelyn Mattos, felizmente, nos ayudó a salvar los inconvenientes, ya que fue ella la que nos apoyó con el sonido aquella noche. Regina Maruyama registró las fotos que ilustran este artículo. Igual salimos satisfechos de la presentación. Las canciones nuevas de KG ("El regreso" y "Honestidad") sonaron sólidas y cumplimos con nuestra meta de presentar nuevo material distinto denuestras canciones clásicas.
La noche la terminamos con Coco, el Bombo y nuestro hermano el "jarkor" Roberto Barba, quien no nos veía desde hace más de 20 años sobre el escenario, conversando con unas chelas sobre la presentación y sobre los viejos buenos tiempos que se reactualizan a su modo en este presente. Seguimos en marcha...
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